Abstract:
La indigente más famosa de la calle 72 le gana la batalla a las adicciones y a toda una vida de dolor, muerte y tragedia. Dice estar orgullosa de su rehabilitación y no quiere volver a los andenes.
Una madrugada cualquiera ‘Bazuquita’ dejó un reguero de sangre mientras paría a su hijo en la calle. Cuando sentía que llegaba la hora ella misma se echó contra una pared, como lo hacen las perras y comenzó su trabajo de parto.